Remedios caseros para aliviar el dolor en la planta de los pies
Casi siempre descuidamos la salud de nuestros pies hasta que algo empieza a causarles dolor o diversas molestias.Si bien estos soportan nuestro peso y nos permiten movernos cada vez que lo queremos, solemos restarles mucha importancia.
Remedios caseros para el dolor en la planta de los pies.
Por fortuna, gracias a las propiedades de algunos ingredientes naturales, podemos preparar una serie de remedios caseros para relajarlos y calmarles el dolor.
Remedios caseros para aliviar el dolor en la planta de los pies
En esta ocasión queremos compartir los algunos remedios caseros para que no dudes en aplicarlos cada vez que lo consideres necesario:
1. Pepino
La pulpa de pepino cuenta con propiedades antiinflamatorias que nos ayudan a relajar los pies tras haber tenido largas caminatas con zapatos demasiado ajustados.
Ingredientes:
- 2 pepinos grandes
- ½ taza de agua (125 ml)
Preparación:
- Trocea los pepinos sin retirarles su cáscara, llévalos a la licuadora y procésalos con la ayuda de media taza de agua.
- Vierte el jugo resultante en un recipiente grande y sumerge los pies durante 15 minutos.
- Procura masajearlos un par de minutos cada uno y enjuaga.
- Úsalo cada vez que te sientas cansada.
2. Aceite de oliva
Un sencillo masaje con aceite de oliva ayuda a reducir la inflamación y los problemas de circulación que afectan la salud de los pies.
Ingredientes:
- 10 gotas de aceite de oliva
Preparación:
- Coloca 5 gotas de aceite de oliva en las palmas de tus manos y frótalas sobre uno de los pies afectados.
- Luego, repite la misma acción con el otro pie.
- Cúbrelos con unos calcetines y déjalos descansar.
3. Manzanilla
Las propiedades antiinflamatorias de la manzanilla son muy útiles para reducir la hinchazón y el dolor que se centra en la planta de los pies .
Ingredientes:
- 3 cucharadas de flores de manzanilla (30 g)
- 1 litro de agua
Preparación:
- Coloca a hervir el litro de agua y vierte las flores de manzanilla.
- Deja reposar la infusión hasta que esté a una temperatura soportable y sumerge los pies en el líquido.
- Repite el tratamiento cada noche, durante una semana seguida.
4. Vinagre de manzana y aceite de almendras
Una simple combinación de vinagre de manzana con aceite de almendras nos puede servir para relajar los pies.
Ingredientes:
- ½ taza de vinagre de manzana (125 ml)
- 1 cucharada de aceite de almendras (14 g)
- ½ taza de agua (125 ml)
Preparación:
- Coloca a calentar el agua y agrégale el vinagre de manzana y la cucharada de aceite de almendras.
- Cuando repose y alcance una temperatura soportable, sumerge los pies durante 20 minutos.
- Masajea para complementar sus efectos y úsalo cada vez que desees sentir alivio.
5. Menta
La infusión de menta tiene un poder relajante que nos puede servir para calmar el dolor y la inflamación en esta parte del cuerpo.
Ingredientes:
- 7 hojas de menta
- 1 litro de agua
Preparación:
- Coloca a hervir el litro de agua y, cuando llegue a ebullición, incorpora las siete hojas de menta.
- Déjalo que se realice la decocción durante 10 o 15 minutos y retira del fuego.
- Cuando alcance una temperatura soportable, sumerge los pies 20 minutos más.
- Úsalo antes de ir a dormir, cada vez que sientas dolor.
6. Aceite esencial de eucalipto
El aceite esencial de eucalipto tiene una acción analgésica y antiinflamatoria que podemos aprovechar para calmar el dolor en la planta de los pies.
Ingredientes:
- 10 gotas de aceite esencial de eucalipto
- 1 litro de agua
Preparación:
- Vierte las diez gotas de aceite esencial de eucalipto en un recipiente con un litro de agua tibia.
- Sumerge los pies por 15 o 20 minutos y muévelos dentro del agua.
- Sécalos bien y abrígalos con unos calcetines.
7. Aceite esencial de lavanda
Otro buen remedio para aliviar esta dolencia es el aceite esencial de lavanda. Este no solo nos relaja con su suave olor, sino que cuenta con un efecto antiinflamatorio que contribuye a aliviar la zona afectada.
Ingredientes:
- 10 gotas de aceite esencial de lavanda
- 1 litro de agua
Preparación:
- Coloca a hervir el agua, agrégale el aceite de lavanda y déjalo reposar.
- Una vez alcance una temperatura adecuada, sumerge los pies y déjalos durante 15 minutos.
- Repite su uso cada vez que sientas dolor.
Como puedes notar, todos estos remedios son muy fáciles de preparar y se pueden elaborar con ingredientes que tenemos en casa.
Recuerda:
Es sumamente importante que estés atento a todos y a cada uno de los síntomas que presentas. Si al iniciar un tratamiento con los remedios caseros que te recomendamos no sientes mejoría. lo mejor es acudir de inmediato a tu médico de confianza y seguir el tratamiento que este te recomiende