Cómo hacer shampoo con bicarbonato y vinagre
La mayoria de los shampoo que utilizamos para el aseo diario contienen sustancias que pueden ser dañinas para la salud, puesto que muchas de ellas traspasan nuestra piel a través de los poros y llegan a nuestro torrente sanguíneo.
Una alternativa natural y saludable son los shampoo ecológicos, elaborados con ingredientes naturales y vegetales, aromatizados con aceites esenciales, pero que desgraciadamente son bastante más caros que los convencionales. Ante este panorama, una solución es recuperar fórmulas tradicionales que sean naturales y no nos cuesten demasiado, como por ejemplo, la de lavarnos el cabello con bicarbonato y vinagre de manzana.
Cómo hacer shampoo con bicarbonato y vinagre
Ingredientes:
- Bicarbonato de sódio
- Vinagre de manzana
- Dos botellas de plástico estilo biberón
Modo de preparación:
Mezclamos una cucharada de bicarbonato con un vaso de agua tibia hasta que se disuelva y con la mezcla llenamos la primera botella . Esta primera mezcla hace la función de shampoo, por lo que podremos aumentar o reducir la cantidad de bicarbonato según si tenemos el cabello más graso o más seco. Cuando más graso sea, más bicarbonato añadiremos.
Mezclamos un cuarto de vaso de vinagre de manzana con un vaso de agua y llenamos la segunda botella. Esta segunda mezcla hace la función de acondicionador, y del mismo modo buscaremos la cantidad de vinagre adecuada para nuestro cabello. Cuanto más seco sea, más vinagre añadiremos.
Modo de aplicación:
- Con el cabello húmedo aplicamos la mezcla de bicarbonato por las distintas zonas de la cabeza y masajeamos con suavidad.
- Aclaramos bien con agua. Notaremos que el cabello está áspero, pero el vinagre equilibrará de nuevo su pH.
- Aplicamos ahora la mezcla de vinagre, repartimos bien y aclaramos de nuevo.
Recomendaciones:
- Si tenemos el cabello muy seco podemos aplicar un poco de aceite de jojoba o sésamo después del lavado, y de vez en cuando podemos aplicar alguna mascarilla hidratante.
- Cuando dejamos de usar productos químicos en el cabello se necesita un periodo de adaptación para que éste vuelva a generar su capa protectora natural, por lo que durante unos días o semanas podemos notar más grasa, caspa, entre otras cosas. Si tenemos paciencia, a la larga nuestro cabello lo agradecerá.